
Según la NASA, el eclipse total comenzará por el Océano Pacífico Sur, para trasladarse por México, Estados Unidos y Canadá. Hay quienes aseguran que el fenómeno cósmico, será el inicio y cumplimiento de profecías que alertan a la humanidad sobre el fin del mundo.
Este fenómeno cósmico, ha generado ansiedad, puesto que han circulado por internet algunos textos de la Biblia que aseguran que este eclipse será la señal del inicio del fin de los tiempos.
Isaías 13:10: “Las estrellas del cielo y sus constelaciones no mostrarán su luz. El sol naciente se oscurecerá y la luna no dará su luz”.
Ezequiel 32:7: “Cuando te extinga, cubriré los cielos y oscureceré sus estrellas; cubriré el sol con una nube, y la luna no dará su luz”.
Joel 2:10; 2:31: “La tierra tiembla, el cielo se estremece, el sol y la luna se oscurecen, y las estrellas ya no brillan... El sol se convertirá en tinieblas y la luna en sangre antes del gran y terrible día del Señor”.
Joel 3:15: “El sol y la luna se oscurecerán, y las estrellas ya no brillarán”
¿Pero realmente esto es así?
Si bien no está mal ser un observador de las posibles señales del inicio de los últimos tiempo, la realidad es que el fin del mundo será la convergencia de muchos factores, como políticos, sociales y económicos. Los versículos mensionados son citados fuera de contexto, y nada tienen que ver con un acontecimiento aislado como el eclipse del 8 de abril.
Lamentablemente, muchos creyentes están dispuestos a creer que estamos a las puertas del fin sin un análisis previo de las escrituras, cayendo en el error por la espectacularidad del momento. La información falsa a menudo está diseñada para generar una respuesta emocional fuerte, como el miedo, la ira o la indignación.
Estas emociones pueden nublar el juicio y hacer que las personas sean más susceptibles a creer en la mentira, especialmente si refuerza sus sentimientos preexistentes. Además, la falta de habilidades para evaluar críticamente la información y discernir entre hechos y opiniones puede hacer que las personas sean más vulnerables a la desinformación y las noticias falsas.
Es importante aplicar principios hermenéuticos (La hermenéutica es el proceso de interpretación de la Biblia) sólidos para entender correctamente el significado de los pasajes bíblicos. Esto incluye considerar el contexto histórico, cultural y lingüístico, así como el género literario y el propósito original del autor.
Además el formular un fundamento bíblico implica tener una comprensión coherente y unificada de las enseñanzas bíblicas en todas las áreas de la teología. Esto implica reconciliar y armonizar los diferentes pasajes de la Biblia para desarrollar una comprensión completa de la verdad bíblica.
Tenemos que tener cuidado de no forzar los acontecimientos y las escrituras para que digan lo que no dice. Recordemos lo que Dios nos habla en Deuteronomio 18:20-22. Dios instruye a su pueblo a no temer a los profetas que hacen predicciones que no se cumplen. Si un profeta habla en nombre de Dios y lo que predice no sucede, es evidencia de que no es un verdadero portavoz de Dios y no debe ser temido ni seguido.
La Biblia advierte sobre el destino de los falsos profetas en Jeremías 23:31. Dios declara: "Así ha dicho Jehová de los ejércitos: no escuchéis las palabras de los Profetas que os profetizan; os alimentan con vanas esperanzas; hablan visión de su propio corazón, no de la boca de Jehová." Aquellos que propagan falsas enseñanzas y pretenden hablar en nombre de Dios enfrentarán juicio y condenación divina.