Tomar Riesgos

Tomar riesgos es esencial para vivir la vida plena que Jesús prometió.

Tomar riesgos significa soltar lo que Dios te pide dejar atrás: relaciones, hábitos o seguridades que te estancan. Como Jacob, que luchó con Dios y salió cojo pero bendecido, a veces el crecimiento duele, pero la recompensa es eterna. No temas perder lo conocido; Dios tiene algo mejor para ti.

Vivir diferente para tener la vida que Jesús murió para darnos

Si quiere tener la vida que Jesús murió para darle, tendrá que vivir un poquito diferente a las personas ordinarias y promedio en el mundo. Es hora de estar en pie, actuar como que creemos lo que decimos que creemos. Amén.

Y si tiene que estar en pie solo, sin ningún amigo en el mundo entero, tome el riesgo. Esté solo en vez de estar sin Dios, y verá lo que Dios hará por usted.

No tenemos tiempo para ir a la iglesia y entretener personas, hacer un espectáculo. Mire, si usted no vino para cambiar, mejor es que se vaya ahora. Pero quizás no vino para cambiar… sin embargo, le digo algo: por eso aún sigo haciendo esto a mi bella edad de 75 primaveras. Porque no soporto lo que el enemigo está haciéndole a la gente y cuán dormidos estamos, dejándole hacerlo.

Usted tiene tanto poder en su interior, tantas razones para vivir y tanto que puede hacer. Si cada persona en este lugar saliera de aquí sabiendo quién es en Cristo y listo para seguir el liderazgo del Espíritu Santo, podría cambiar todo el estado, y no tomaría mucho tiempo hacerlo.

Romanos 12:2

“Y no se conformen a este mundo. Estamos en el mundo, pero no somos de él. No se conformen, no comprometan la Palabra de Dios.”

La Biblia dice que en los últimos días, lo bueno será llamado malo, y lo malo será llamado bueno. ¿Qué fue lo que me dijeron hoy? “Que la fe está evolucionando.” ¡No lo diga! Bueno, sí, ya lo estoy diciendo. La fe es lo que siempre ha sido, no va a evolucionar. No podemos vivir locamente, descuidadamente, y pensar que por ir a la iglesia o poner un pez en el parachoques, todo está bien.

Decídase a vivir con integridad

Si usted fuera la única persona que tomara la decisión: “Voy a hacer algo y lo voy a hacer bien. No voy a comprometer mis valores por mi empleo, ni mi integridad por una promoción. Voy a hacer lo que Dios quiere que haga, y creo que Él me elevará más alto que cualquier persona jamás podría”Amén.

No se comprometa. ¿Qué significa comprometerse? Vivir un poquito por debajo de lo que sabe que es correcto. Haga lo que dice que va a hacer: devuelva las llamadas, trate a otros como quisiera ser tratado, devuelva el carrito del supermercado. No necesitamos cristianos mentirosos.

Como usted vive cuando nadie lo ve es más importante que cómo actúa el domingo en la iglesia. Dios ve todo, todo el tiempo. Todos tenemos un pasado, pero también un gran futuro. Como Mefiboset, cojo de los pies, pero terminó comiendo en la mesa del rey el resto de su vida.

Dios entiende sus debilidades

Tenemos un Sumo Sacerdote que entiende nuestras debilidades, porque Él fue tentado en todo, pero sin pecado. Si se levanta cada día decidido a dar su mejor esfuerzo con la ayuda de Dios, Él hará grandes cosas por usted.

No se preocupe por ser famoso aquí. Sea famoso en el cielo y en el infierno. El infierno debe estremecerse cuando usted pone sus pies en el suelo cada mañana. Todo lo que tiene que hacer es salir al mundo y actuar como un cristiano.

Jacob: Un hombre transformado

Jacob era un engañador, estafador, mentiroso… pero Dios lo transformó. Llegará un momento en su vida donde estará tan desesperado por Dios que dejará todo atrás. Como Jacob, que luchó con Dios y dijo: “No te soltaré hasta que me bendigas”.

Al final, Jacob salió cojo, pero bendecido. Siempre tendremos debilidades, pero eso no impide que Dios haga grandes cosas con nosotros.

Tomar riesgos es Dejar ir lo que debe dejar

A veces, Dios nos pide que soltemos cosas: amigos, comodidades, incluso ministerios. Cuando dejé mi trabajo en la iglesia, perdí amigos, me despidieron, pensaron que estaba loca… pero Dios me levantó.

Si hoy está sintiendo que debe soltar algo, hágalo. No es fácil, su alma puede estar atada, pero con el tiempo, Dios lo levantará. Lo que Dios levanta, nadie lo puede derribar.

Oración:
“Dios, no sé qué pasará cuando dé este paso, pero aquí estoy. Suelto todo y me aferro a Ti. Guíame, úsame. En el nombre de Jesús, Amén.”

Joyce Meyer