BARRABÁS O JESÚS. Bosquejos Biblicos para Predicar Mateo 27:17
Fue un día solemne aquel en el que Jesús estaba callado en pie ante Pilato y el pueblo, un día con una pesada carga de consecuencias de gran alcance. Siempre es un día así cuando un alma es llevada a tomar su decisión definitiva por Dios o por el mundo. Observemos:
I. Quiénes son. Barrabás y Jesús.
1 BARRABÁS. Uno que también lleva el nombre de Jesús. Un quebrantador de la ley, un bandido y asesino. Enemigo de Dios y de todos los mejores intereses de la sociedad.
2 JESÚS. El Hijo de Dios y Amigo del hombre. Uno que fue haciendo continuamente el bien. Uno que sufrió por la salvación de otros.
II. Lo que son. Son representantes de dos diferentes reinos: de dos diferentes gobernantes que están opuestos entre sí.
1 EL REINO DE BARRABÁS. El reino de este mundo malo, el reino de las tinieblas gobernado por el príncipe de las tinieblas.
2 La gran actividad de ellos es privarles a los hombres de su tiempo, de sus afectos, de sus voluntades y de sus almas. Intentan robar tanto a Dios como al hombre.
3 EL REINO DE JESÚS. Jesús representa al Reino de Dios. Él toma el lugar del sacrificio por el pecado, y la vida eterna que es el don de Dios. Él es la luz y la vida de los hombres, el Redentor Sustituto.
III. Dónde están. Se encuentran ambos delante del pueblo (v. 21), esperando la decisión individual de ellos. De una forma u otra se han encontrado juntos delante de cada generación desde aquel día. Todos aquellos a los que Cristo es predicado deben tomar su decisión.
1 NO PUEDES TENER A AMBOS. Barrabás y Cristo son opuestos, tan diamétricamente como las tinieblas y la luz. «No podéis servir a Dios y a Mamón [las riquezas].» No podéis amar a la vez al mundo y a Dios. El que se haga amigo del mundo se constituye en enemigo de Dios. No hay escapatoria posible: debes escoger o el uno o el otro.
2 TU DESTINO ETERNO DEPENDE DE TU ELECCIÓN. Ellos dijeron: «¡Barrabás!», y ¿qué siguió? Su sangre sigue sobre ellos hasta el día de hoy. ¿Y qué dices tú? En Cristo hay vida; en el Barrabás de este mundo hay muerte. Tanto la vida como la muerte han sido puestas delante de ti. «Escoged la vida» (Dt. 30:15).