Adoremos a Jesús de Todo Corazón
ADÓRAME SOLO A MÍ. Mientras más ocupa tu mente algo, más cerca está de transformarse en tu dios. Las preocupaciones, si se lo permites, se pueden transformar en un ídolo. La ansiedad se impone por sí misma, infestando tu mente como un parásito.
La ansiedad se impone por sí misma, infestando tu mente como un parásito
Libérate de estas mordazas renovando tu confianza en mí y estimulándote en mi Presencia. Lo que ocupa tu mente es invisible e indetectable a otras personas.
Pero yo estoy leyendo tus pensamientos continuamente buscando evidencias de que confías en mí. Me gozo cuando tu mente se vuelve a mí. Cuida tus pensamientos diligentemente. Los buenos pensamientos te mantendrán cerca de mí.
SALMO 112.7; 1 CORINTIOS 13.11