Jesús dijo: "Para los hombres esto es imposible; mas para Dios todo es posible" (Mateo 19:26). Jesús dijo esto para fortalecer nuestros corazones.
Al ver tu situación hoy, ¿se ve imposible para los hombres? ¿Es imposible para ti el ser sanado? ¿Es imposible que tu familia vuelva a unirse? ¿Es imposible que se resuelva esa situación? ¿Todas las voces de tus parientes y de los médicos y de los profesionales y de los amigos, te dicen la palabra "imposible"? Si es así, entonces oye la dulce voz del Hijo de Dios, que no miente. "Las cosas que son imposibles para los hombres son posibles para Dios. "
De esto es de lo que se trata este libro. Te dirá cómo puedes moverte en el sexto sentido llamado la fe. Puedes deshacerte de esos grilletes que te mantienen en el reino de lo natural y tocar a Dios quien está en el reino de lo sobrenatural.
Este libro te enseñará a estar consciente de dos mundos, el mundo visible y el mundo invisible. Aprenderás cómo puedes ponerte en contacto y actuar en la ley de lo invisible, donde no hay imposibilidades.
Amigos míos, mi corazón se regocija al saber que ustedes van a encontrar la ayuda y el milagro
que necesitan. En nuestra familia hemos experimentado muchos milagros como resultado de la verdad, que voy a compartir con ustedes en este libro.
Mi esposa es enfermera titulada y puede vividamente describir a nuestra hija Lisa, quien nació anormal hace más de veinte años. El pediatra dijo que ella sufría de perlesía cerebral. No tenía reflejos de succión, no tenía tono muscular. No tenía habilidad para gatear.
Su cuerpo estaba débil. Y la palabra "imposible" estaba escrita sobre su vida. Nuestros corazones estaban entristecidos. Parecía que no había forma de que ella tuviera oportunidad de vivir una vida normal. Enfrentamos esta situación y pusimos en acción las leyes y los principios de Dios presentados en este libro.
Cuando comenzamos a actuar en Dios, como lo hizo ese amigo mientras viajaba en el aeroplano, hallamos las verdades eternas de Dios. En nuestro interior, ellas trajeron luz para iluminar nuestro entendimiento. Empezamos a regocijarnos porque nuestra hija era sana.
Oramos la oración de fe, la ungimos con aceite. Aunque no hubo cambios en su cuerpo y parecía que ella sería anormal para siempre, nuestro hombre espiritual, nuestra naturaleza espiritual declaró que teníamos la certeza de que Lisa había sido sanada por la herida del Señor Jesucristo.
Todo en ella gritaba: "No, no, no, ella no es normal". Sin embargo, nosotros sabíamos lo contrario en nuestro interior. Cada uno de nuestros cinco sentidos gritaba: "No, no, no, ella no está sana". Sin embargo, ese sentido llamado FE que predomina en nuestra naturaleza espiritual, ese sentido que tiene conocimiento por revelación de Dios, venció a todos los sentidos naturales. Me alegra anunciarles que después de veintidós años (al escribir esto), nuestra hija continúa sana y normal.
Esto se hizo una realidad desde que ella era una niña muy pequeña. Vivió normalmente todos sus años escolares y doy gracias a Dios que ella es normal y está bien hasta el día de hoy porque descubrimos cómo movernos en este sexto sentido llamado la fe. La fe se alimenta de la Palabra de Dios. La fe es del corazón.
Yo podría narrarles muchísimos milagros en la vida de nuestros otros hijos, en la mía y en la de mi esposa, que son como resultado de funcionar utilizando el sexto sentido. Déjame animarte a que medites en la Palabra de Dios.
Estudia las verdades presentadas en este libro hasta que puedas levantarte por encima de la palabra "imposible". Comienza a actuar en el reino de la fe.
La fe es del corazón.
Medita sobre estas verdades hasta que penetren y lleguen más allá de tu mente carnal. Medita sobre estas verdades hasta que se internalicen en tu espíritu. Recíbelas en tu hombre espiritual como conocimiento por revelación de Dios, quien es Espíritu.
Al meditar en el Señor empéñate en entablar una comunicación de Espíritu a espíritu (o sea tu espíritu comunicándose, escuchando y respondiéndole a Dios quien es Espíritu).
Veamos la Palabra de Dios mientras continuamos exponiendo estas verdades. Regocíjate desde ahora porque Dios te dará los deseos de tu corazón.
En Génesis 1:1-3 dice: "En el principio Dios (preparó, formó, diseñó), y creó los cielos y la tierra. La tierra estaba sin forma y era un vacío yermo, y las tinieblas estaban sobre la faz de las grandes profundidades. El Espíritu de Dios se movía, (cerniéndose, empollando) sobre la faz de las aguas. Y Dios dijo: Sea la luz; y se hizo la luz" (Amplified Bible).
Leemos en Hebreos capitulo 11, versículo 3: "Por fe entendemos que los mundos (durante las edades sucesivas) fueron enmarcados — diseñados, puestos en orden y equipados para el propósito para el cual fueron destinados — o la palabra de Dios, de manera que lo que vemos no fue hecho de cosas que son visibles" (Amplified Bible).
Estas escrituras nos enseñan a unir nuestras manos con las del Creador. Dios nuestro Padre es creador. Jeremías dijo: "¡Oh, Señor Jehová! He aquí que tú hiciste el cielo y la tierra con tu gran poder, y con tu brazo extendido, ni hay nada que sea difícil para ti" (Jeremías 32:17).
Sabemos que Jesús es creador. Colosenses 1:16 dice: "Porque fue en él que todas las cosas fueron creadas en el cielo y en la tierra, cosas que se veían y cosas que no se veían, sean tronos, dominios, gobernadores o autoridades; todas las cosas fueron creadas y existen a través de él (por su servicio, intervención) y en y para él" (Amplified Bible).
Juan 1:1-3 dice que Jesús fue también creador del universo. Sabemos que el Espíritu Santo es creador. Somos de la clase de Dios y pertenecemos a su familia. Dios espera que tengamos habilidad creativa. Tenemos que unir nuestras manos con las de El. En estos días hemos sido hechos colaboradores con Dios para crear cosas.
En Hebreos 11:3 dice: "Por fe entendemos que los mundos (durante las edades sucesivas) fueron enmarcados — diseñados, puestos en orden y equipados para el propósito para el cual fueron destinados — por la palabra de Dios, de manera que lo que vemos no fue hecho de cosas que son visibles" (Amplified Bible).
Tú eres un pequeño mundo. Todos tenemos el nuestro. Mientras algunas personas están alegres, tu mundo puede estar haciéndose añicos. Puede estar como el mundo al principio; sin forma, vacío y las tinieblas moviéndose sobre la faz del abismo (Génesis 1:2). Es posible que ésta sea la forma en que estás hoy, con tu mundo vacío, en caos y tinieblas.
¡Gracias a Dios tu mundo puede ser reconstituido!
¡Tu mundo puede ser remodelado!
¡Tu mundo puede ser equipado para el propósito para el cual fue destinado!
Esto se logra por medio de la Palabra de Dios y de las fuerzas invisibles de Dios. Veamos otra vez Hebreos 11:3: "De manera que lo que vemos..." ¿Qué vemos? La estrellas, la luna, el sol, la tierra, los árboles, el polvo, las flores, la hierba, las nubes. La Biblia dice que lo que vemos no fue hecho de las cosas que son visibles. Lo que vemos fue hecho de cosas invisibles.
Lo que vemos en este mundo natural fue realmente hecho de fuerzas invisibles. Hebreos 11:3 está hablando acerca de dos mundos — hay un mundo que vemos y hay un mundo que no vemos. Existe el mundo visible y el mundo invisible. Hay un mundo material y un mundo espiritual. La Biblia dice que lo que ves en lo físico, en el reino material, no fue hecho de cosas que se veían sino que fue hecho de lo invisible. Es significativo que Dios comenzara este capitulo de fe de esta manera.
El Creador del universo empezó con fuerzas invisibles. Comenzó en el área de lo que no vemos. Empezó en la dimensión espiritual. Todos los ladrillos creativos de
Dios están en otra dimensión — el mundo
invisible.
LOS LADRILLOS QUE NECESITAMOS PARA CREAR NO SON DE ESTA DIMENSIÓN MATERIAL.
Están en otra dimensión. Dios tiene ladrillos, sustancia creativa que todos podemos usar, pero no están en el universo material Sus ladrillos están allá en lo invisible, en lo que no vemos, en el mundo espiritual
LAS COSAS QUE SE VEN NO SON HECHAS DE COSAS VISIBLES, SINO DE COSAS INVISIBLES