Aunque toda la casa es un altar de adoración, nuestra recomendación es que establezca un lugar físico especial para la intimidad con Dios. Debe ser algún espacio clave de la casa, una especie de "refugio" de adoración e intercesión.
«No iré a mi hogar
ni me permitiré descansar;
no dejaré que mis ojos duerman
ni cerraré los párpados adormecidos
hasta que encuentre un lugar donde construir una casa para el Señor,
un santuario para el Poderoso de Israel».
Salmos 132:3-5 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Esto es una ley espiritual muy poderosa que David ejecutó y también otros hombres de Dios. Ellos entendieron que Dios era omnipotente, y que estaba en todo los lugares a la vez, sin embargo, Su presencia manifiesta reposa donde le preparan un lugar donde El es el centro y donde es bien recibido.
Ahí se activan los "Anfitriones de Su presencia", donde le damos lo que El quiere recibir y como consecuencia de su amor habrá justicia, gozo y paz en nosotros y, consecuentemente , en la casa.
Es en la intimidad en donde recibimos:
- Convicción de Quienes somos como parte de la familia de Dios
- Consejos de Nuestro Padre celestial
- Estrategias para el avance del reino de Dios
- Creatividad
- Ideas de Administracion de dones, recursos y tiempo
- Sabiduría para educar a los hijos y a las nuevas generaciones
- Sanidad para las relaciones familiares
- Acuerdo en las decisiones de la casa
"Los secretos del Señor son para los que le temen, y El les dará a conocer su pacto" Salmo 25:14
Un ejemplo: En nuestra casa adaptamos una de las habitaciones para que sea el Lugar de Jesús. Pusimos una alfombra con almohadones. Un equipo de música con adoración sonando continuamente (aunque nosotros no estemos allí, pero sí los ángeles manteniendo el ambiente).
En ese lugar siempre tenemos una Biblia a mano, un cuaderno para escribir lo que recibimos del Señor, y un mapa para interceder por lo que El ama.
Todo esto es una sugerencia, no una exigencia. El primer punto define cómo establecer ese lugar de intimidad: por medio de la guía del Espíritu Santo, Romanos 8:14
Si solo tu eres cristiano en tu casa, tienes que creer que la adoración produce expansión. Se fiel en lo poco y sobre lo mucho Dios te pondrá. Comienza en tu habitación o en algún otro espacio pequeño, pero !comienza! No esperes a tener todas las condiciones para hacerlo.
Dios no está interesado en la infraestructura de un templo, sino en corazones dispuestos a intimar con El. Será cuestión de tiempo para que el clima de la casa cambie.
El verdadero altar a Dios es hecho de piedras vivas, esto se refiere a dos o tres personas reunidas en su nombre.
Todo altar de adoración produce una respuesta del cielo que cambia la realidad de la tierra. Así que, aunque sientas oposición de todos lados, no dejes de creer y avanzar, porque solo los valientes arrebatan el Reino de los cielos y lo llevan a su territorio.
El Rey David tuvo que pelear contra jebuseos para tomar lo que se transformó en la "ciudad de David", Jerusalén, que vino a ser el lugar de reposo del Dios vivo de Israel. 1 Crónicas 11:4-7 / 1 Samuel 5:6-10
De modo que es vital que estés dispuesto a guerrear contra toda oposición, para preparar un lugar de intimidad; entonces tendrás paz y reposo para disfrutar con el Rey del universo en tu casa.
Tomado del Libro "Hogar Dulce Hogar"
Marcos Brunet