Encuentra un pensamiento para reflexionar en los devocionales cristianos. Obtén aliento y fortaleza diaria en estas reflexiones cortas de la Palabra de Dios. Comienza el día conectado a Dios.
Cristo había cumplido a favor de los pecadores todo lo que la ley de Dios requería de ellos. La completa expiación había sido hecha. Todo lo que la ley ceremonial presagió se había cumplido.
Las palabras de Jesús al ladrón moribundo le transmitieron una promesa incondicional de perdón completo, cubriendo cada mala acción que había hecho. No se esperaba que expiar sus propios pecados, hiciera penitencia o realizara cualquier ritual.
Desafortunadamente, hay mucha superstición y confusión sobre el significado de la sangre de Cristo. Un popular libro escrito hace varios años por un autor evangélico conocido sugiere que hay algo único acerca de la química de la sangre de Cristo
Los corderos solo simbolizaban un sacrificio más perfecto que Dios mismo proveería para quitar los pecados. Por esto Juan el Bautista miró más allá de los sacrificios de animales y señaló al verdadero «Cordero de Dios que quita el pecado del mundo»
El servicio sacrificial y el amor de unos por otros debe caracterizar a los seguidores de Cristo. Después de todo, cada uno de nosotros es esclavo, llamados a imitar el ejemplo abnegado de nuestro propio Amo.
Desde una perspectiva humana, el futuro de la iglesia y el éxito a largo plazo del evangelio dependían enteramente de la fidelidad de ese puñado de discípulos. Si ellos fallaban, no había un plan B, es decir, un plan alternativo.
Cuando nos demos cuenta de que hemos estado constantemente faltándole el respeto a Dios, nos sentiremos llenos de vergüenza y de humillación por haberle ignorado.
Cuando Jesús le dijo al paralítico tus pecados te son perdonados (Mateo 9.1–8), Él se había puesto deliberadamente a sí mismo en el centro de un escenario que obligaría a todos los observadores a dar un veredicto sobre Él
Hay un lugar, una corona y un arpa especial reservadas para ti. Ningún otro podrá tomar tu porción, pues está reservada en los cielos para ti; tú la poseerás dentro de poco, pues en la gloria no habrá tronos desocupados cuando todos los elegidos se reúnan allá.